¡Hola, emprendedor! Hoy abordamos dos temas que impactarán tu negocio y la economía familiar de manera directa: el Presupuesto Público 2025 y cómo, bajo el discurso de seguridad, el gobierno prioriza el control de protestas y conflictos sociales por encima de medidas preventivas que realmente podrían beneficiar a los ciudadanos y sus emprendimientos.
El Presupuesto Público no solo define en qué gastará el gobierno, sino también qué tan favorable será el entorno para tus negocios. Si eres emprendedor, debes entender cómo la priorización de ciertos gastos afecta tu capacidad de operar y prosperar en un país que enfrenta un creciente descontento social. Aquí te explicamos por qué esta distribución del presupuesto podría no ser tan beneficiosa como parece.
El gobierno de Dina Boluarte ha presentado el presupuesto 2025 priorizando Orden y Seguridad, pero un análisis crítico revela que lo que realmente está en el centro de atención no es la lucha contra la criminalidad que afecta a los emprendedores, sino el control de las movilizaciones sociales. El presupuesto destinado a controlar protestas y conflictos violentos sube un 64%, alcanzando los S/1.125 millones. Mientras tanto, áreas como la prevención de emergencias, desastres naturales y programas que abordan problemas estructurales como la minería ilegal o la violencia contra la mujer, ven recortes sustanciales.
Es claro que la seguridad que se promueve en este presupuesto está más relacionada con mantener el control sobre una sociedad descontenta que con generar un ambiente seguro y propicio para los pequeños negocios. La pregunta que surge es: ¿en qué momento se priorizó más el control que el bienestar social?
Si eres emprendedor, te enfrentarás a un entorno más volátil. Los recortes en la prevención de desastres y emergencias (con una reducción del 24.36%) y en la lucha contra la minería ilegal (con un 8.5% menos de presupuesto) ponen en riesgo la estabilidad que necesitas para operar. En cambio, los recursos se destinan a controlar manifestaciones y conflictos que reflejan una creciente desconfianza en el gobierno. En otras palabras, las prioridades del Estado parecen estar más orientadas a sofocar la disidencia que a proteger a quienes están generando empleo y moviendo la economía.
Este aumento en el presupuesto para el control social, en lugar de abordar las verdaderas causas del descontento, podría generar más incertidumbre. Los pequeños negocios, sobre todo aquellos que dependen de la estabilidad local, se ven afectados por la falta de inversiones en prevención y mejoras en la infraestructura social.
Desde una perspectiva económica, esta distribución presupuestaria podría tener efectos negativos a largo plazo. Si el gobierno sigue recortando fondos en áreas preventivas, los emprendedores tendrán que enfrentar más riesgos sin el respaldo necesario. Esto puede traducirse en pérdidas económicas cuando no haya respuesta rápida frente a desastres o emergencias. Además, el enfoque en control social genera un clima de incertidumbre que afecta la confianza de los inversionistas y, en consecuencia, limita las oportunidades de crecimiento para los negocios locales.
En lugar de apostar por medidas que generen un entorno más seguro y estable para los ciudadanos y emprendedores, el gobierno prefiere desviar recursos hacia el control social. Este desequilibrio podría desencadenar más protestas y conflictos, lo que, paradójicamente, exigirá aún más inversión en el control de una población que ya no confía en las decisiones gubernamentales.
El impacto de esta política es claro: menos protección y más incertidumbre para los emprendedores. Mientras las medidas punitivas aumentan, las acciones preventivas disminuyen. La reducción de fondos en áreas como la lucha contra la minería ilegal y la violencia de género refleja una falta de visión a largo plazo. Para los negocios, esto significa operar en un entorno cada vez más hostil y sin las herramientas necesarias para enfrentar los riesgos que vienen con la inestabilidad social y económica.
Como dice el dicho: «Cuando el río suena, piedras trae». Y en este caso, el sonido de la inestabilidad social está aumentando. Para los emprendedores, esto significa estar preparados para un entorno donde el control social es prioritario, pero las soluciones a los problemas reales siguen sin llegar.
Preguntas frecuentes:
- ¿Cómo afecta este presupuesto a la estabilidad de los negocios?
El presupuesto prioriza el control de protestas en lugar de la prevención de riesgos, lo que deja a los emprendedores más vulnerables frente a emergencias y desastres. - ¿Por qué es importante el enfoque preventivo en el presupuesto?
Invertir en prevención reduce los riesgos a largo plazo y genera un entorno más estable para los negocios. El recorte en áreas clave deja a los emprendedores expuestos a mayores desafíos operativos.
👉🏽 Según Decreto Legislativo N° 1524, las empresas y los sujetos que oferten bienes y servicios deben consignar sus números de RUC en toda la documentación utilizada en sus ofertas. Cuaderno Borrador es una marca administrada por Flanker Investment Group (RUC 20609240068)


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