El reciente Decreto Legislativo N.º 1645, publicado el 13 de septiembre de 2024, busca modernizar y fortalecer el Sistema Nacional de Tesorería y el Sistema Nacional de Endeudamiento Público (por si no lo leíste te lo adjuntamos). Aunque las autoridades económicas del país lo presentan como una solución para mejorar la gestión de los recursos del Estado, varios expertos advierten sobre los riesgos que estas nuevas disposiciones podrían generar en un contexto económico delicado, especialmente por el riesgo de que Perú no cumpla con su regla fiscal de mantener un déficit fiscal del 2%.

Autonomía en la gestión de riesgos fiscales: ¿ventaja o peligro?

Uno de los puntos más relevantes del nuevo decreto es la autonomía que se otorga a la gestión de riesgos fiscales. En principio, esta medida podría mejorar la eficiencia con la que el Ministerio de Economía y Finanzas maneja los riesgos económicos y financieros del país. Sin embargo, la falta de un marco de control robusto sobre esta autonomía puede resultar en una administración desorganizada o, peor aún, en una mayor exposición del país a eventos imprevistos que afecten sus finanzas públicas.

Expertos señalan que sin un monitoreo adecuado, el sistema descentralizado de tesorería podría generar ineficiencias en el manejo de los recursos públicos, lo que incrementaría los problemas de liquidez. Esto es especialmente preocupante si se considera el contexto actual de incertidumbre fiscal en el que Perú se encuentra.

El riesgo de un mayor endeudamiento

El decreto también establece nuevas reglas para la emisión de Letras del Tesoro Público y permite la creación de fideicomisos que facilitarán la obtención de recursos en el corto plazo. Si bien estas herramientas ofrecen una solución inmediata para financiar las operaciones del Estado, el uso excesivo de deuda pública podría exacerbar el problema del déficit fiscal. Actualmente, el país ya enfrenta serias dificultades para cumplir con su límite de déficit del 2%, y el uso de deuda a corto plazo sin un plan concreto de reembolso solo profundizaría esta crisis.

Recordemos que la emisión de más deuda sin una clara estrategia de reducción del déficit puede ser pan para hoy y hambre para mañana. Si seguimos dependiendo del endeudamiento, corremos el riesgo de comprometer la estabilidad fiscal en los próximos años. Y se vienen tiempos electorales ¿el gobierno se controlará en el gasto fiscal?

El programa Reactiva Perú: un salvavidas con consecuencias

Otra medida destacada en el decreto es la flexibilización de las acciones de cobranza de las deudas honradas por el programa Reactiva Perú, creado durante la pandemia para mantener la cadena de pagos. Bajo esta nueva normativa, las entidades financieras podrán aplicar descuentos o refinanciamientos para facilitar el cobro de los préstamos otorgados. No obstante, esto también representa un riesgo para las finanzas del Estado, ya que la recuperación completa de los fondos honrados no está garantizada.

Si bien esta flexibilización busca apoyar a las empresas que enfrentan dificultades, puede derivar en pérdidas significativas para el gobierno, complicando aún más la gestión del déficit fiscal.

El decreto delega gran parte de la administración de fondos públicos a los niveles descentralizados del Estado. Esto puede parecer una medida positiva en términos de eficiencia operativa, pero los riesgos de una mala supervisión son altos. La administración local de los fondos puede verse afectada por problemas de capacidad técnica o incluso corrupción, lo que pondría en peligro la estabilidad financiera del país.

Reflexión final: decisiones de alto riesgo

La implementación del Decreto Legislativo N.º 1645 llega en un momento crítico para el país, que ya enfrenta un panorama fiscal difícil. Si bien las medidas propuestas pueden modernizar los sistemas de tesorería y endeudamiento, los riesgos asociados, especialmente el de un mayor endeudamiento sin control y el posible incumplimiento del déficit fiscal, deben ser considerados seriamente por las autoridades.

Como dice un antiguo refrán popular: «No se puede tapar el sol con un dedo». Si el gobierno no toma acciones contundentes para mitigar estos riesgos, las finanzas públicas podrían verse gravemente afectadas en los próximos años.

Preguntas frecuentes:

¿Cómo afectará el decreto al déficit fiscal de Perú?

Aunque el decreto busca mejorar la gestión de los fondos públicos, también aumenta las posibilidades de endeudamiento. Si no se controla adecuadamente, esto podría llevar a un mayor déficit fiscal.

¿Qué riesgos plantea la autonomía en la gestión de riesgos fiscales?

Sin un sistema de supervisión riguroso, la mayor autonomía en la gestión de riesgos podría generar ineficiencias o problemas de liquidez en los niveles descentralizados del Estado.

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