Del 26 al 28 de noviembre, Arequipa será escenario del foro empresarial más importante del Perú, la 62ª edición de CADE Ejecutivos, organizado por IPAE Asociación Empresarial. Este evento llega en un momento crítico para el país, marcado por la falta de liderazgo y la búsqueda de soluciones conjuntas entre empresarios y autoridades. ¿Cómo puede este encuentro cambiar el rumbo del Perú? Descubre cómo los debates y acuerdos de este foro podrían impactar en tu vida y en la economía nacional.

Tras 12 años, Arequipa vuelve a ser sede del CADE Ejecutivos, gracias al trabajo coordinado de la Cámara de Comercio e Industria de Arequipa (CCIA), presidida por Julio Cáceres. Esta edición no solo se centrará en la situación geopolítica y geoeconómica global, sino también en la reconstrucción de un país degradado, destacando la urgencia de una visión compartida entre empresarios, sociedad civil y jóvenes.

El bloque inaugural ofrecerá una perspectiva estratégica del estado del Perú en el contexto internacional, abordando las tendencias económicas y sociales que deben moldear el futuro del país. Más allá de grandes empresarios, el evento busca integrar a medianos y pequeños emprendedores, fortaleciendo la economía desde la base.

Una brújula para la democracia

Los fenómenos tratados en el CADE, como la reconstrucción del tejido social y económico, responden a teorías de crecimiento inclusivo, donde todos los sectores de la sociedad trabajan juntos hacia objetivos comunes. Estas iniciativas pueden ser clave para fortalecer la democracia, ya que promueven el diálogo, la participación activa y la transparencia en la toma de decisiones.

Además, el enfoque en la colaboración intersectorial resuena con los estándares GRI (Global Reporting Initiative), especialmente en lo relacionado con la GRI 102-15: Principales impactos, riesgos y oportunidades. Este evento demuestra cómo los empresarios pueden abordar riesgos y aprovechar oportunidades para generar impacto social y económico positivo.

El CADE Ejecutivos 2024 aborda de manera directa los principales impactos que enfrenta el Perú, como la desconfianza institucional, la falta de liderazgo y la desigualdad socioeconómica. Desde la perspectiva del GRI 102-15, el evento identifica estos desafíos como áreas críticas que deben ser tratadas con urgencia. En este foro, empresarios, líderes civiles y jóvenes trabajan en una visión compartida que permita reducir los impactos negativos en la economía y la sociedad, fomentando un entorno más inclusivo y sostenible.

Entre los riesgos destacados, el más crítico es que las discusiones del CADE no se traduzcan en acciones concretas. Esto perpetuaría la desconfianza en las instituciones y líderes empresariales, además de ampliar la brecha entre los grandes actores económicos y la población. Sin embargo, también se identifican oportunidades significativas, como la posibilidad de fortalecer la cohesión social, impulsar la innovación en el sector empresarial y crear redes de desarrollo regionales, que podrían transformar el panorama económico y social del Perú.

El foro también promueve una alineación con los estándares GRI, especialmente con el GRI 102-15, al reconocer riesgos, impactos y oportunidades como pilares centrales de las discusiones. El énfasis en construir soluciones sostenibles y transparentes posiciona al CADE como un catalizador de cambio, donde el liderazgo inclusivo y la acción colaborativa son clave para impulsar el desarrollo económico y social del país.

Las decisiones y acuerdos alcanzados en foros como el CADE pueden traducirse en mejores políticas públicas, mayor inversión en infraestructura y oportunidades laborales, impactando directamente en las familias peruanas. La búsqueda de un liderazgo renovado puede devolver la confianza en las instituciones y el futuro del Perú.

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