La industria cinematográfica, emblemática de Los Ángeles, enfrenta una transformación que impacta tanto a trabajadores como a la economía regional. En los últimos años, la economía de Los Ángeles ha sufrido debido a eventos que han sacudido la industria del entretenimiento. Desde el auge de plataformas de streaming hasta la pandemia de COVID-19, cada factor ha contribuido al declive de las producciones locales. Según FilmLA, la producción cinematográfica cayó un 5% en el tercer trimestre de 2024 en comparación con 2023. Esta cifra refleja un fenómeno económico conocido como deslocalización industrial, donde las empresas buscan ubicaciones con menores costos operativos.
El fenómeno de la deslocalización no es casualidad. Georgia, con su programa de incentivos fiscales ilimitados, ha atraído más de $4 mil millones en producción en los últimos años. Nuevo México, por su parte, ha captado inversiones significativas, como los $575 millones que Netflix destinó a producciones en ese estado desde 2019, incluyendo la ampliación de su complejo de estudios en Albuquerque.
En contraste, California está tratando de mantener su posición aumentando su programa de incentivos fiscales de $330 millones a $750 millones anuales. Esta medida, anunciada por el gobernador Gavin Newsom, podría entrar en vigor en julio de 2025, pero enfrenta críticas por ser una reacción tardía.
El análisis de Patrick Adler, economista a The New York Times, destaca que los altos costos de vida y operación en Los Ángeles han incentivado a los estudios a trasladarse a estados como Georgia y Nuevo México, donde los beneficios fiscales son más atractivos. Según Adler, esta tendencia también responde a la teoría de los costos comparativos, donde las empresas eligen operar en lugares que optimizan sus recursos.
Los Ángeles, históricamente considerado el corazón de la industria del entretenimiento, enfrenta una caída significativa en su actividad económica vinculada al cine y la televisión. Según datos del Bureau of Labor Statistics, los empleos en el sector de grabación y producción han caído un 15% desde mayo de 2023. FilmLA reportó que la producción de películas disminuyó un 5% en el tercer trimestre de 2024 en comparación con el mismo periodo en 2023. Estas cifras subrayan una tendencia alarmante: la descentralización de Hollywood.
El declive también es evidente en el gasto total de la industria en la región. Un informe del Consejo de Desarrollo Económico del Condado de Los Ángeles estimó que la industria aporta $115 mil millones anuales y sostiene 681,000 empleos, desde técnicos de sonido hasta negocios locales como floristerías y servicios de catering. Sin embargo, estas cifras están en riesgo de seguir disminuyendo si no se toman medidas inmediatas.
Impacto económico y social
El impacto va más allá de los grandes estudios. Los empleos indirectos, como los de floristas, catering y lavanderías, están en riesgo, afectando la base económica de la ciudad. Datos del Consejo de Desarrollo Económico del Condado de Los Ángeles muestran que esta industria genera $115 mil millones al año y sustenta 681,000 empleos.
La caída en la producción no solo afecta a los grandes estudios. Negocios como Triscenic Production Services, que ofrece almacenamiento para estudios, reportaron una pérdida de $9 millones en 2023, pasando de $25 millones anuales a $16 millones. Además, el ecosistema de pequeños negocios que depende de la industria enfrenta una incertidumbre creciente.
Algunos sectores, sin embargo, están aprovechando el cambio. De acuerdo con un estudio del Otis College of Art and Design, el empleo en áreas como videojuegos y deportes electrónicos ha aumentado, reduciendo la dependencia del cine y la televisión. Estos sectores representan el 48% de la economía del entretenimiento en Los Ángeles, un aumento significativo en comparación con el 36% de hace una década.
Sin embargo, la caída del 15% en empleos relacionados con la producción audiovisual desde 2023 obliga a muchos, como Deborah Huss Humphries, a recurrir a ahorros o buscar ayuda en bancos de alimentos. Este efecto dominó pone en evidencia la necesidad de políticas públicas más efectivas, como el aumento en los incentivos fiscales propuesto por el gobernador Gavin Newsom y la alcaldesa Karen Bass.
El estándar GRI 201-1, sobre el impacto económico directo, se cumple al analizar cómo las políticas fiscales propuestas buscan generar un efecto positivo en la economía local. Iniciativas como las de la alcaldesa Bass destacan la importancia de reportar estos impactos para promover transparencia y sostenibilidad en el sector.
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