📢 La Cámara de Comercio de Lima (CCL) pidió a la Sunat mantener en reserva la clasificación de riesgo tributario que asigna a los contribuyentes que pagan fuera de plazo. Según el gremio, al calificar públicamente a las empresas como morosas o deudoras, incluso tras regularizar su situación, se genera una afectación a su reputación que puede perjudicar sus relaciones comerciales, acceso a créditos e incluso su participación en licitaciones públicas.

Durante la Mesa Técnica Operadores y Normatividad del Comercio Marítimo, organizada por el Congreso de la República, el presidente de la CCL, Roberto De La Tore, sostuvo que esta calificación debe ser de uso interno y no una etiqueta pública. “Se convierte en una doble sanción”, señaló, haciendo énfasis en que muchas veces los errores ya han sido corregidos, pero la penalización reputacional se mantiene.

La crítica empresarial también apuntó al actual régimen tributario, al que califican como poco incentivador de la formalización. De acuerdo con la CCL, el sistema castiga incluso a quienes corrigen sus errores voluntariamente, lo cual podría fomentar la informalidad. “Permanecer en la formalidad se vuelve más costoso y riesgoso”, advirtió el gremio.

En la misma línea, Leonardo López, segundo vicepresidente de la CCL, recordó que el perfil de cumplimiento fue establecido mediante decreto legislativo con rango de ley, por lo que su modificación compete al Congreso, no a la Sunat ni al Ejecutivo.

Adicionalmente, la CCL exhortó a actualizar la Ley General de Aduanas, vigente desde hace más de 15 años, para adaptarla a las exigencias del comercio actual. De La Tore propuso una normativa orientada a facilitar el comercio sin dejar de lado el control fiscal, y señaló que las reglas no deben diseñarse solo pensando en quienes incumplen, sino en quienes cumplen correctamente.

El presidente de la CCL también criticó las sanciones aduaneras por demoras en el pago, que pueden alcanzar hasta el 30 % del valor FOB si no se paga exactamente en el plazo declarado. Estas multas, afirmó, se suman a una carga tributaria injusta para los importadores, cuando en realidad deberían ser responsabilidad de la autoridad aduanera.

Finalmente, la CCL llamó a construir una legislación más eficiente y realista con la participación de todos los actores del sistema: Sunat, empresarios y operadores logísticos.

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🧠 NO PIERDA DE VISTA ESTOS DATOS

Actualización urgente: La Ley General de Aduanas necesita ser reformada tras más de 15 años sin cambios, para adaptarse a las dinámicas modernas del comercio exterior.

Clasificación pública: Calificar como “morosos” a contribuyentes formales puede afectar su reputación y limitar su acceso a financiamiento y contratos.

Doble sanción: Aunque un error sea corregido, la calificación negativa se mantiene, lo que desincentiva la formalidad.

Multas excesivas: Las sanciones por pagos fuera de plazo pueden llegar al 30 % del valor FOB, afectando desproporcionadamente a los importadores.

Cambio de ley: El perfil tributario fue establecido por decreto legislativo, por lo que su modificación depende del Congreso, no de la Sunat.