📢 La revolución energética llegó al corazón del agro peruano. Insoelec Solar, en alianza con Huawei, ha completado la instalación de un sistema fotovoltaico de alto rendimiento en una planta productora de uvas en Ica, una de las regiones clave del sector agroexportador. El proyecto, que se finalizó en diciembre de 2024, incluye 5080 módulos solares, una estación de transformación y 10 inversores Huawei SUN2000-330KTL-H1, tecnología de última generación que permite reducir costos, aumentar la eficiencia energética y avanzar hacia una operación sostenible.
Según lo informado por la empresa, la implementación de estos equipos generará un promedio de 1,070 MWh al año y permitirá evitar la emisión de 580 toneladas de CO₂ anuales, lo que equivale a retirar de circulación a cientos de vehículos. Este paso no solo representa un beneficio ambiental directo, sino también un ejemplo de cómo las energías renovables pueden transformar sectores tradicionales como la agroindustria.
Lo que observamos es un ejemplo de sostenibilidad energética es decir la capacidad de producir, distribuir y consumir energía de forma que satisfaga las necesidades actuales sin comprometer los recursos y el equilibrio ambiental del futuro. Esto implica reducir la dependencia de combustibles fósiles, minimizar las emisiones de gases de efecto invernadero y promover el uso de fuentes renovables como la solar, eólica o hidráulica. Además, la sostenibilidad energética busca mejorar la eficiencia en el uso de la energía, garantizar el acceso equitativo a ella y fomentar modelos de desarrollo económico que sean compatibles con la protección del medio ambiente y el bienestar de las generaciones futuras.
La tecnología de Huawei destaca por su alta confiabilidad y eficiencia, y ha sido clave para optimizar el consumo energético de la planta, reduciendo su dependencia de fuentes convencionales. La combinación de innovación tecnológica y compromiso ambiental fortalece la competitividad de las empresas peruanas en mercados internacionales cada vez más exigentes en términos de sostenibilidad.
Durante su ejecución, el proyecto también generó más de 70 empleos directos, beneficiando a decenas de familias locales y promoviendo el desarrollo económico en una región donde el agro es uno de los principales motores productivos. Este tipo de inversiones refuerza la transición energética del país y posiciona al Perú como un actor comprometido con la mitigación del cambio climático.
La incorporación de soluciones solares en el sector agroindustrial responde además a una tendencia global: diversificar las fuentes de energía para ganar autonomía, reducir huella de carbono y prepararse ante posibles crisis energéticas. Iniciativas como esta reafirman que el futuro del agro peruano también es solar.
🧠 NO PIERDA DE VISTA ESTOS DATOS
Modelo replicable: Este caso muestra cómo el agro peruano puede liderar la adopción de energías renovables a nivel regional.
Reducción de CO₂: El sistema fotovoltaico evitará 580 toneladas de emisiones anuales, equivalente al retiro de cientos de autos.
Producción energética: La planta generará alrededor de 1,070 MWh por año, impulsando su autosuficiencia.
Impacto local: Más de 70 empleos directos fueron creados durante la ejecución del proyecto.
Tecnología aplicada: Se utilizaron 10 inversores Huawei SUN2000-330KTL-H1, reconocidos por su eficiencia.


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