📢 En medio de una escalada sin precedentes entre las dos economías más poderosas del planeta, China anunció este miércoles 9 de abril que incrementará al 84 % los aranceles a productos procedentes de Estados Unidos. La medida, que entra en vigor el jueves 10, es una respuesta directa al aumento del 50 % ordenado por el presidente de EE.UU.Donald Trump, quien ya había elevado las tasas a bienes chinos anteriormente. Con la nueva orden del 50% China se enfrenta ahora a un arancel total de 104 %. El conflicto suma así un nuevo capítulo de presión mutua, sin señales claras de diálogo.

El Ministerio de Finanzas de China justificó la medida como una reacción ante el “repetido error” estadounidense, mientras que el Ministerio de Comercio amplió su ofensiva con la inclusión de 12 nuevas empresas estadounidenses en su lista de control de exportaciones, y otras seis en su lista de entidades no confiables. Estas incluyen compañías del rubro militar y tecnológico, como Cyberlux, Sierra Nevada Corporation, Novotech, Echodyne y BRINC, que ahora enfrentan restricciones para operar con contrapartes chinas.

La tensión ya se venía acumulando desde el 2 de abril, cuando EE.UU. impuso un arancel base del 10 % a todas las importaciones pero además con tasas más altas para países como China (34 %) y la Unión Europea (28 %). Pekín respondió de inmediato con un paquete de contramedidas: arancel recíproco del 34 %, sanciones a empresas estadounidenses, restricciones a la exportación de tierras raras (materiales clave para la tecnología), y suspensión de importaciones agrícolas.

El martes 8, el Ministerio de Exteriores chino endureció su posición. Su portavoz, Lin Jian, criticó la actitud de Washington, afirmando que las acciones de EE.UU. «no reflejan una voluntad genuina de entablar un diálogo serio». Lin fue enfático: “Si realmente quiere dialogar, debe hacerlo con respeto, igualdad y beneficio mutuo”. Y agregó que China “está preparada para llegar hasta el final” si la Casa Blanca insiste en una guerra arancelaria sin considerar el impacto global.

El vocero también arremetió contra la estrategia estadounidense, señalando que el país norteamericano actúa con “unilateralismo, proteccionismo y acoso económico en estado puro”, y que sus medidas violan las normas de la Organización Mundial del Comercio (OMC). En ese sentido, China ha presentado una demanda formal contra Estados Unidos ante el organismo multilateral.

Esta nueva ofensiva revive las tensiones del primer mandato de Trump (2017-2021), durante el cual impuso aranceles por más de US$ 370.000 millones anuales a bienes chinos. Ahora, lejos de acercarse a una solución negociada, ambas potencias intensifican sus posturas y arrastran al resto del mundo a un escenario de incertidumbre económica.

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📆 LÍNEA DE TIEMPO DE LA ESCALADA COMERCIAL

• 2 de abril: EE.UU. impone arancel base del 10 % a todas las importaciones, con tasas diferenciadas para ciertos países: 34 % para China y 28% para la UE.
• 3 de abril: China responde con arancel recíproco del 34 %, sanciones a empresas, restricciones a tierras raras y suspensión de importaciones agrícolas.
• 8 de abril: China denuncia ante la OMC y el Ministerio de Exteriores rechaza el enfoque de EE.UU., advirtiendo que “no hay ganadores en una guerra comercial”.
• 9 de abril: Trump amenaza con otro 50 % si China no retira sus contramedidas. Con este arancel adicional, China enfrentará un arancel de 104%
• 10 de abril (si en el futuro, dado que en China ya es ese día): Entra en vigor el nuevo arancel del 84 % a productos estadounidenses; China amplía sus listas de sancionados.

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🧠 NO PIERDA DE VISTA ESTOS DATOS

Impacto global: La confrontación pone en riesgo las cadenas de suministro, la estabilidad de precios y el orden comercial multilateral.

Escalada: China eleva los aranceles a EE.UU. del 34 % al 84 %, mientras Trump amenaza con nuevos gravámenes que llegan a 104% si no hay retroceso.

Sanciones cruzadas: Pekín restringe empresas clave de defensa y tecnología de EE.UU., y denuncia a Washington ante la OMC.

Material estratégico: China limita la exportación de tierras raras, esenciales para tecnología global.

Diálogo roto: China acusa a EE.UU. de actuar sin voluntad de negociación ni respeto mutuo, calificando sus medidas de «acoso económico».