Estados Unidos declara emergencia energética y ordena blindar su red eléctrica

📢 Ante una creciente demanda energética impulsada por la inteligencia artificial y el retorno de la manufactura nacional, el gobierno de EE. UU. emitió la Orden Ejecutiva 14262 para fortalecer de inmediato la fiabilidad y seguridad de su red eléctrica. La medida se presenta como respuesta directa a lo que el Ejecutivo califica como una “emergencia nacional de energía”, declarada oficialmente en enero de 2025.

La iniciativa busca garantizar que todas las fuentes de generación disponibles —incluyendo aquellas con suministro de combustible seguro y redundante— estén plenamente operativas ante cualquier riesgo de colapso de la red. Para ello, el Departamento de Energía desarrollará en 30 días una nueva metodología para medir la capacidad de reserva en cada región del país, y en 90 días deberá publicar un análisis detallado de los riesgos en cada zona.

El plan también incluye mecanismos para evitar que plantas clave de más de 50 MW salgan de operación o cambien de fuente de energía si eso significa reducir la capacidad de generación efectiva. La medida habilita el uso acelerado de la sección 202(c) de la Ley Federal de Energía, que permite ordenar a las generadoras operar a máxima capacidad en situaciones de emergencia.

Este movimiento tiene implicancias económicas profundas: podría frenar el cierre de plantas tradicionales, modificar inversiones en energía renovable, y reorganizar el mapa energético estadounidense. Todo en nombre de una consigna clara: evitar apagones en una economía cada vez más electrificada.

🧠 NO PIERDA DE VISTA ESTOS DATOS

Intervención directa: El Departamento de Energía podrá ordenar a empresas eléctricas operar a máxima capacidad en momentos críticos.

Emergencia energética: El gobierno declaró oficialmente una emergencia nacional por riesgo de insuficiencia eléctrica.

Demanda histórica: El crecimiento de los centros de datos y la industria local presionan la red eléctrica más allá de su capacidad.

Respaldo obligatorio: Las plantas generadoras críticas no podrán cerrar ni cambiar de fuente si eso reduce la capacidad total.

Análisis público: En 90 días se publicará un informe oficial con los riesgos regionales y las reservas de energía.

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