📢 ¿Te has sentido agotado aunque no hayas hecho «nada extraordinario»? Puede que no sea falta de energía, sino falta de propósito. Cada vez más personas están atrapadas en una rutina sin sentido, cumpliendo con tareas diarias que no conectan con sus objetivos personales… simplemente porque “toca”.

Levantarse, trabajar, estudiar, volver a casa y repetir. Esa forma de vivir en automático está generando un tipo de agotamiento silencioso que afecta la salud emocional, la motivación y hasta la toma de decisiones. Según la OMS, los casos de ansiedad y depresión han aumentado especialmente entre quienes sienten que su vida carece de dirección.

Para Susan Llontop, docente de Innova Teaching School, el problema no es la carga, sino la falta de claridad. “Cuando las personas no comprenden por qué hacen lo que hacen, su vida pierde coherencia”, afirma. Esa desconexión impacta directamente en el rendimiento académico o laboral, pero también en algo más profundo: el compromiso con uno mismo.

Este fenómeno todavía es subestimado como problema educativo o de salud mental. Pero no se trata solo de estrés. Es una desconexión existencial que nos deja en piloto automático, obedeciendo sin cuestionar, rindiendo sin sentido.

¿Qué se puede hacer? Llontop propone cinco acciones concretas para romper ese círculo: detenerse a pensar en las propias motivaciones, transformar tareas en metas, alinear acciones con valores, replantear el vínculo con el esfuerzo e incluir espacios de creación y reflexión. Porque no se trata de hacer menos, sino de vivir con más intención.

El sistema laboral y educativo sigue premiando el cumplimiento, no el sentido. Pero si no sabes para qué haces lo que haces, ¿cuánto más podrás sostenerlo?

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🧠 NO PIERDA DE VISTA ESTOS DATOS

• AGOTAMIENTO SILENCIOSO: No siempre es exceso de trabajo, a veces es vivir sin propósito. Impacto: afecta la motivación, incluso en tareas simples.
• MODO AUTOMÁTICO: Repetir sin reflexionar genera desconexión. Impacto: disminuye la calidad de vida y las decisiones conscientes.
• DESENFOQUE EDUCATIVO: El sistema valora cumplir más que entender. Impacto: estudiantes que rinden, pero no aprenden a elegir.
• PROPÓSITO PERSONAL: Tener claridad ayuda a sostener el esfuerzo. Impacto: mejora el rendimiento y el bienestar emocional.
• ESPACIOS DE REFLEXIÓN: Leer, escribir o crear rompen el ciclo mecánico. Impacto: permite ver la vida desde ángulos más humanos.